(Dedicado a quienes tienen algún ser querido fuera del país)
Poema y foto cortesía de Nelson Ures Villegas.
Quisiera también creer
que la distancia es efímera espuma
o la noche
una pausa oscura en el andar del sueño.
Quisiera creer en lo milagroso del pensamiento
para recorrer con un suspiro
la lejanía sin ti
alcanzando la maravilla real de nuestro abrazo.
Quisiera hacer verdad una mentira
la más bondadosa mensajera del anhelo
una amigable ilusión en la insinuación de un poema
anunciando la verdad de tu presencia.
Quisiera creer en un mundo
asomado a los ventanales de las despedidas
más como una gota de agua
y no como una lluvia empapando la ausencia…
quisiera hoy
viendo tu fotografía
tener la levedad
y yo allí, a tu lado, como en otros tiempos
protegiéndote del frio.
Quisiera que todos los recorridos te traigan de regreso
y el cuento de volver algún día fuera breve
y muy largo
el “no te irás”
No quisiera mil y una noche
para nuestros lejanos saludos
solo está noche quisiera
para que no haya otros cuentos
sino, tu presencia en ésta,
la privilegiada vez
de estar y seguir juntos.
Eso es lo que quisiera
no me culpes por eso
por mi mezquino gusto
(es un defecto mío)
aprisionar afectos
cuando la libertad
prefiere, y lo sé,
un amplio cielo para sus anchas alas.
Quisiera,
y no necesariamente
ha de ser lo que yo quiera,
que si te vas regreses pronto
a esta algarabía del hogar
con la alegría del perro por ese aroma de amistad
que traes en tu piel.
Las cosas de la vida tienen cada misterio
mas, al querer esto, te digo:
que he de estar vivo a tu regreso
es lo que quiero
y al quererlo digo
¡te amo!
Barquisimeto, Venezuela.
14 de febrero de 2025..
