El día 20 de marzo de 2025, el presidente Donald Trump dictó una Orden Ejecutiva con el propósito de modificar el Departamento de Educación, teniendo como objetivo “que padres, maestros y comunidades puedan garantizar el éxito estudiantil de la mejor manera posible”
Destaca que el futuro brillante de nuestra nación depende de familias empoderadas, comunidades comprometidas y excelentes oportunidades educativas para cada niño.
Los contribuyentes gastaron alrededor de $200 mil millones a nivel federal en escuelas durante la pandemia de COVID-19, además de los más de $60 mil millones que gastan anualmente en fondos federales para escuelas.
El Departamento de Educación es la agencia más reciente del Gabinete y ha buscado convencer a Estados Unidos de que el control federal sobre la educación es beneficioso.
Si bien el Departamento de Educación no educa a nadie, mantiene una oficina de relaciones públicas con más de 80 empleados, con un costo de más de 10 millones de dólares anuales.
Hoy en día, los puntajes en lectura y matemáticas en Estados Unidos están cerca de mínimos históricos. La Evaluación Nacional del Progreso Educativo de este año mostró que el 70% de los estudiantes de octavo grado no alcanzaban el nivel de competencia en lectura y el 72% en matemáticas.
El Departamento de Educación gestiona actualmente una cartera de deuda por préstamos estudiantiles de más de 1.6 billones de dólares. Esto significa que el programa federal de ayuda estudiantil tiene aproximadamente el mismo tamaño que Wells Fargo. Sin embargo, aunque Wells Fargo cuenta con más de 200,000 empleados, el Departamento de Educación tiene menos de 1,500 en su Oficina de Ayuda Federal para Estudiantes.
Se ordena el cierre del Departamento de Educación y Devolución de Autoridad a los Estados en la medida que lo permita la ley.
Se tomarán todas las medidas necesarias para facilitar el cierre del Departamento de Educación y devolver la autoridad sobre la educación a los estados y las comunidades locales, garantizando al mismo tiempo la prestación eficaz e ininterrumpida de los servicios, programas y beneficios de los que dependen los estadounidenses.
El Secretario de Educación garantizará que la asignación de fondos federales del Departamento de Educación se ajuste rigurosamente a la ley federal y a las políticas de la Administración.
Se ponga fin a la discriminación ilegal encubierta bajo la etiqueta de «diversidad, equidad e inclusión» o términos similares, así como a los programas que promuevan la ideología de género.
Esta orden en nada menoscaba:
- autoridad otorgada por ley a un departamento o agencia ejecutiva, o a su titular; o
- las funciones del Director de la Oficina de Administración y Presupuesto en relación con las propuestas presupuestarias, administrativas o legislativas.
- se implementará de conformidad con la legislación aplicable y sujeto a la disponibilidad de asignaciones.
- Esta orden no tiene por objeto, ni crea, ningún derecho ni beneficio, sustantivo ni procesal, exigible en derecho o en equidad por ninguna de las partes contra los Estados Unidos, sus departamentos, agencias o entidades, sus funcionarios, empleados o agentes, ni ninguna otra persona.
Nota del editor: Aldea Educativa Magazine no se involucra en temas políticos, sin embargo, esta noticia es sumamente importante para el sector estudiantil de este país, por ello lo transmitimos en español para nuestros lectores. Desconocemos de algún precedente a nivel mundial de esta medida y mucho menos de sus consecuencias, pero no podemos menos que desear que ello vaya a beneficio de la población estudiantil norteamericana y de los trabajadores del sector.