Antes de ser palabra
yo fui silencio;
fui pájaro, fui flor, fui lluvia…
Allá, dónde los colores humedecen los ecos del tiempo
y una mañana puede ser roja, azul, dorada,
o si el silencio calla
su transparencia lo envuelve todo
como una canción en sus orígenes.
Ahora que soy palabra, digo:
Digo amor,
digo esperanza.
Pero volveré a ser silencio,
y habré dejado una canción para que se sepa que nunca estoy solo.
Porque digo caballo, mujer, niño, pájaro, hermano, piedra y mas,
porque el silencio está lleno de estrellas,
y cada estrella es una palabra,
y a su vez cada palabra es una estrella,
asi, como una arañita preñada.