¿Estás terminando tu formación y no sabes que hacer en el futuro? ¿La has terminado hace algunos años pero no estás contento/a con tu vida profesional? o ¿si lo estas pero necesitas un cambio?

Son preguntas que todos nos hacemos y aunque no lo sepamos es un momento crítico de nuestras vidas, la respuesta a esas preguntas va a condicionar nuestro futuro, tanto personal como profesional.

Normalmente la gente se plantea varias opciones:

  1. Estudiar una formación de post grado o master
  2. Buscar un trabajo cerca de donde vives
  3. Hacer unas prácticas en el extranjero
  4. Hay otras opciones pero son menos frecuentes

Antes de empezar a valorar las diferentes opciones, lo primero que recomiendo que haga cualquier persona es que se plantee como quiere que sea su vida en el futuro, como piensa que va a ser realmente feliz.

Cuando esto lo tengas claro te va a ayudar mucho a tomar la decisión acertada.

  1. Estudiar una formación de post-grado

La primera opción es por la que suele optar muchas personas y está bien pero siempre y cuando lo hagas por una razón lógica.

Yo estudie un máster o formación de post-grado, un MBA, como no tenía formación empresarial y quería montar mi propia empresa, quería formarme en diferentes facetas en las que no tenía conocimientos, el máster cumplió mis expectativas porque lo hice con un objetivo claro.

La mayoría de mis compañeros hicieron el máster pensando que les iba a abrir las puertas del mercado laboral, que gracias a ese máster los iban a contratar en buenos empleos e iban a ser directivos de éxito pero lamentablemente no fue así y no cumplió con sus expectativas.

  1. Buscar un trabajo cerca de donde vives

En España que es donde nosotros estamos, no es fácil encontrar un empleo, tenemos un 50% de paro juvenil por lo que hay mucha gente que decide emigrar y buscar trabajo en el extranjero. Para los que vivís en un país en la que esta opción sea más factible es una posibilidad pero si os soy sincero, siempre va a estar ahí por lo que sí es lo que queréis, lo podéis posponer y vivir nuevas experiencias.

  1. Hacer unas prácticas en el extranjero.

Hay muchas personas que hacen programas de intercambio cultural como los work and travel/Working Holiday mientras estas estudiando, el más popular en el de Estados Unidos pero hay muchos Australia, Canadá, y cada vez hay más países que se unen a esta tendencia porque es genial.

Este tipo de programas tiene el objetivo de mejorar otro idioma y ganar dinero mientras trabajas pero no sueles trabajar de algo relacionado con tus estudios.

Otra opción muy buena son los Internship, realizas una práctica profesional remunerada.  Trabajas en el extranjero de algo relacionado con lo que has estudiado.

Sigues formándote y de una forma práctica

A diferencia de los master en los que se aprender mucha teoría, en un Internship entras en el contacto con el mundo laboral. Aprendes lo mismo o más que en un master pero aplicado a la práctica.  Lo haces de gente reconocida en el sector que ya tiene experiencia y de la que aprendes todos sus trucos, forma de trabajar, etc.

  • Incorporación al mercado laboral o aprendizaje de nuevos métodos de trabajo

Puede ser que sea tu primera experiencia profesional lo que te aportara muchísimo porque empezaras a conocer el mercado laboral o que ya lleves unos años trabajando, en este segundo caso aprender de la forma de trabajar de gente con otra cultura a la tuya.

Mejora tu curriculum

Hace 10, 15 años, al menos en España, podía ser que realizar una formación de post grado, era algo que te hacia diferente al resto pero en la actualidad casi todo el mundo realiza este tipo de formación. Lo que de verdad aporta una gran ventaja es realizar una práctica internacional, por diferentes razones: Al estar en otro país mejoras otro idioma,  habrás ganado experiencia profesional en otro país y las empresas valoran mucho que hayas tenido esta tipo de experiencia,

  • Crecimiento personal

Mientras estas realizando tu práctica en el extranjero tendrás que aprender a resolver situaciones por ti mismo, lo que te ayudara a ganar confianza en ti mismo.

Trabajaras en un entorno multicultural, con gente de diferentes países y que en ocasiones no pensaran de la misma forma que tu. Te convertirás en un ciudadano del mundo.

  • Mejorar otro idioma

Depende del país en el que realizas la práctica pero si puedes elegir, para los hispanoparlantes, lo mejor es hacerla en un país angloparlante ya que el inglés es básico para todo, para el trabajo, para viajar, para hacer nuevos amigos.

Conocerás gente de diferentes partes del mundo, serán tu principal apoyo mientras realices tu práctica y se convertirán en tu nueva familia.

  • Sales de tu circulo de confort

Cuando realizar un Internship en el extranjero si sigues viviendo con tu familia, será la oportunidad perfecta para salir  del cobijo de papa y de mama, te convertirás en una persona independiente y te ayuda a valorar mucho más las cosas,  bajo mi punto de vista es lo que cambia tu perspectiva, te ayuda a madurar y a crecer profesional y personalmente.

Si ya eres independiente en tu país, es una gran oportunidad para cambiar de aires y conocer una nueva cultura, quien no se aburre de vivir siempre lo mismo? Nuestra generación es así, queremos vivir cosas nuevas y esta es una genial oportunidad de conseguirlo.

Si optar por la práctica en el extranjero es cierto que en algunos casos hay que realizar una inversión previa para las gestiones del visado, seguro, la agencia, etc, pero es una inversión que realmente merece la pena por todo lo que te aporta.

Fuente:    Alberto Menérguez

Director de Let’s live usa